los CRM, comprenden varias funcionalidades para gestionar las ventas y los clientes de la empresa: automatización y promoción de ventas, tecnologías data warehouse (almacén de datos) para agregar la información transaccional y proporcionar capa de reporting, dashboards e indicadores claves de negocio, funcionalidades para seguimiento de campañas de marketing y gestión de oportunidades de negocio, capacidades predictivas y de proyección de ventas, etc.
Un buen CRM ha de ser flexible, fácil de usar y que esté diseñado para la empresa. Si es así transforma cada punto de contacto de la marca en una oportunidad de marketing y aprovecha el potencial oculto dentro de la base de datos de los clientes. Con esta información pueden comercializar productos de una manera más eficaz, mejorar la productividad y obtener conocimientos accionables en los esfuerzos de marketing.